Técnica terapéutica creada por Bert Hellinger. Busca el amor como fuente de implicaciones, sufrimientos y enfermedades. Lo que interesan son los sucesos no lo que la persona opina o siente en ese momento. Lo no sanado se transmite de generación en generación. Se trata de averiguar si la persona, en el ámbito de la familia extensa, se encuentra implicada en suertes de anteriores miembros de la familia. (Implicación significa que alguien en la familia, inconscientemente, vuelve a asumir y a vivir la suerte de otro miembro de la familia anterior a él).
Es importante saber si los padres viven separados, la muerte de hermanos, si alguien fue excluido o expulsado, si alguien no fue respetado, estancias en el hospital a temprana edad, complicaciones durante el parto, muertes tempranas, injusticias, etc. Pertenecen a la familia todos los que tienen vínculos de sangre en línea vertical y horizontal. Reconocidos o no. También son familia los que fueron asesinados, intencionalmente o no por algún miembro de mi familia y los que por su desgracia hubo beneficios para mi familia. Los que dejaron su lugar para otra persona (1as parejas, por ejemplo). Cuando los excluidos son reconocidos e integrados de nuevo, se convierten en fuerza protectora para el que se encontraba identificado. Aquellos que tienen que asumir el destino de un excluido son obligados injustamente por la conciencia de grupo, ya que ellos son absolutamente inocentes. La conciencia de grupo apoya a los antepasados.
La conciencia nos vincula con nuestra familia. La conciencia colectiva inconsciente de la familia no permite que nadie sea excluido, que nadie sufra ninguna injusticia, sin que más tarde esta persona sea representada por otro miembro de la familia, hasta que pueda salir a la luz la primera persona y se sepa la injusticia que sufrió. Para que le den la honra y vuelva a ser integrado como miembro de la familia. Nada se queda sin pagar. Debe haber un reconocimiento. Cuando sale a la superficie un secreto hay sanación Hay que reconocer y enfrentar los hechos para que el problema se detenga.
LEYES:
Ley del derecho a la pertenencia.
Todo el que una vez perteneció a la familia tiene derecho a pertenecer a ella.
Ley de la prioridad de lo anterior, jerarquía.
Ningún miembro posterior debe inmiscuirse en el destino de los anteriores. Respeto a los padres y antepasados, jerarquía por niveles y por edades si están en el mismo nivel.
Ley del equilibrio. En un mismo nivel debe haber equilibrio entre el dar y el recibir.
PROPOSITOS:
Incluir a los excluidos, honrar a los que han sido deshonrados, dejar ir a los que se tienen que ir. Pasar del amor infantil al amor adulto, ver el amor del otro, respetar, dejar la responsabilidad con quien corresponde. El amor infantil quiere cuidar a los padres, hacerse responsable por ellos, resolverles los problemas. No sirve, perjudica . Se llega a la solución cuando se encuentra el punto justo para todos en la familia; cuando cada uno se encuentra en el lugar que le corresponde, cuando asume lo que tiene que asumir y cuando se centra en sí mismo sin interferir en la esfera de los demás. Entonces todos se sienten bien, con su plena dignidad.
Se llega a una imagen de solución, no se debe actuar inmediatamente. La imagen debe descansar en el alma y tu no haces nada para cambiar. La imagen, simplemente estando, actúa. Al cabo de un tiempo en tu alma se reúne la fuerza necesaria para hacer lo correcto y esto se da de forma natural. Sin forzar. La imagen impulsa algo en el alma que luego posibilita la acción.
La imagen de solución actúa si se le da oportunidad de que penetre como tal en el alma. Bert Hellinger dice que todos pertenecemos a un alma más grande. Todos estamos unidos y somos iguales en esta Gran Alma.
Tomando a los padres tal y como son, nos podemos separar de ellos y a la vez nos unimos en el corazón. A través de los padres el hijo recibe tanto sus posibilidades como sus límites. En cuanto la persona asiente a ambos aspectos este acto es como una entrega al mundo tal como es.
La mejor manera de honrar a un muerto es vivir de la mejor manera posible. El muerto sigue viviendo en el corazón.
Respetar el destino del antepasado y dejarlo con él. Cuando un antepasado sufre algo muy fuerte, nadie debe consolarlo ni cargar con eso por él. La dignidad de una persona en una situación así exige que los demás dejen que él lleve su carga. Entonces es grande. No debe inmiscuirse nadie.
Para muchos el problema y el sufrimiento son más fáciles que la solución. Esto tiene que ver con que el sufrimiento o mantener el problema aportan una profunda sensación de inocencia o de lealtad, pero a un nivel mágico e infantil.
Dinámicas de fondo:
•“Te sigo”... a la muerte, a la enfermedad, a tu destino...
•“Mejor yo antes que tú”, prefiero morir yo antes que tú, prefiero marcharme yo antes que tú, etc. (yo en vez de ti).
•La expiación de una culpa.
El canal de percepción de CF se basa mucho en el cuerpo. Sensaciones, emociones, percepciones. Movimientos del alma.Para realizar una constelación es necesario como punto de partida un tema.
Las constelaciones actúan sobre la imagen interior. La imagen interior y la realidad son dos cosas diferentes. Las constelaciones no dan indicaciones sobre como obrar, actúan a un nivel más profundo.
La plenitud se da en el momento en que todos los que forman parte de mi familia, todos mis antepasados, tienen un lugar honroso en mi corazón, de manera que los vea como son realmente. En cuanto tienen ese lugar, la persona queda libre.
En la expiación la persona está totalmente concentrada en ella misma, en consecuencia no puede ver el amor del otro. Con la expiación se da una compensación de consecuencias fatales para todos. Debe llegarse a una compensación en un nivel superior; asumir la responsabilidad y las consecuencias de sus actos y ver el amor del otro. Esto requiere más fuerza y se convierte en una bendición.
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